28 de septiembre de 2011

Situaciones.

Ella te voltea a ver.
Tu la ignoras a proposito.
Ella se queda observando durante un largo rato tu mirada perdida en la nada.
Un silencio incómodo.
Ella se acerca poco a poco y espera a que "esas" palabras surgan de tu boca como una fuga de agua.
Las palabras no llegan y el silencio se torna más incómodo aún.
No aparta la mirada de tu rostro, procurando encontrar tus ojos, y que tu descubras en los suyos el enojo que está surgiendo de las profundidades de su corazón.
Sigues sin voltear. Y ella aclara su garganta a proposito para dar paso a un inminente berrinche.
Ella suelta el brazo al cuál estaba aferrada con fuerza (tu brazo derecho). Lo suelta poco a poco, y se aleja de su pocisión de ataque lentamente, como esperando a que te arrepientas por tan cruel acción.
Finalmente volteas hacia donde esta ella. Intentas encontrar su mirada, y solo te encuentras con un mar de lágrimas silenciosas que recorren sus mejillas sonrojadas.
Ella te mira con desprecio, con odio, con mucho odio, un odio que evidentemente esconde un dolor inexplicable.
Te levantas lentamente de tu asiento.
Ella sabe lo que pasará, pero imagina millones de posibilidades distintas a la realidad.
Le das la espalda.
Ella se prepara para el golpe final.
Tu... Solo te quedas parado, en el mismo sitio. Das la media vuelta y te topas con su rostro lleno de lágrimas,ubicado cinco centímetros abajo del tuyo. Sus ojos, a la altura de tu mentón. Su cabello huele a fresa, y el aroma que desprende, es como el de una fragancia de flores en primavera.
Ella alza la mirada y encuentra finalmente tus ojos.
Los dos saben que pasará a continuación, pero ninguno se atreve a dar el siguiente paso.
Se miran el un al otro, como procurando callar todo aquello que los aqueja.
Le tomas la mano.
Ella siente la textura de tu piel, y enseguida aprieta con más fuerza su mano con la tuya.
Una última lágrima.
Un beso de despedida.
Un suspiro de complicidad.
Un susurro.
Un  "Te Amo"...

Dos personas, que le han dado vida, a una tercera


Gracias por leerme.

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